Nuestra misión es evangelizar y llevar la palabra de Dios a todos los rincones del planeta y por sobre todo predicar las enseñanzas de Jesús, doctrina de la Iglesia. Ora por nosotros Dona aquí Si nos lees desde un teléfono celular, entonces prueba nuestra versión para dispositivos móviles: Clic aquí Comparte el Evangelio en las redes sociales Facebook Twitter Whatsapp Google Diálogo introductorio con Jesús Señor, me pongo bajo tu presencia en este momento para pedirme que me ayudes a cumplir con mis compromisos y a tener la suficiente capacidad de organizar mi vida de acuerdo a tu amor. No quiero que la desesperación me atrape en los momentos turbios de mi vida, por eso, invoca la protección del Espíritu Santo para que me dé la valentía de ponerme en acción e ilumine mis pensamientos con ideas claras y concisas para no caer en errores que corten mi relación Contigo. Te amo mi Dios, te ofrezco mis percances de este día. Abro mi corazón a Ti para recibir todo lo bueno que quieras darme. Amén Evangelio del día: Con fe puedes caminar en la oscuridad y en la dificultad Mateo 14,22-36 - XVIII martes tiempo ordinario: Jesús le tendió la mano, lo sostuvo y le dijo: Hombre de poca fe, ¿por qué dudaste? Evangelio según San Mateo 14,22-36 Jesús camina sobre las aguas: "En seguida, obligó a los discípulos que subieran a la barca y pasaran antes que él a la otra orilla, mientras él despedía a la multitud. Después, subió a la montaña para orar a solas. Y al atardecer, todavía estaba allí, solo. La barca ya estaba muy lejos de la costa, sacudida por las olas, porque tenían viento en contra. A la madrugada, Jesús fue hacia ellos, caminando sobre el mar. Los discípulos, al verlo caminar sobre el mar, se asustaron. "Es un fantasma", dijeron, y llenos de temor se pusieron a gritar. Pero Jesús les dijo: "Tranquilícense, soy yo; no teman". Entonces Pedro le respondió: "Señor, si eres tú, mándame ir a tu encuentro sobre el agua". "Ven", le dijo Jesús. Y Pedro, bajando de la barca, comenzó a caminar sobre el agua en dirección a él. Pero, al ver la violencia del viento, tuvo miedo, y como empezaba a hundirse, gritó: "Señor, sálvame". En seguida, Jesús le tendió la mano y lo sostuvo, mientras le decía: "Hombre de poca fe, ¿por qué dudaste?" En cuanto subieron a la barca, el viento se calmó. Los que estaban en ella se postraron ante él, diciendo: "Verdaderamente, tú eres el Hijo de Dios. Al llegar a la otra orilla, fueron a Genesaret. Cuando la gente del lugar lo reconoció, difundió la noticia por los alrededores, y le llevaban a todos los enfermos, rogándole que los dejara tocar tan sólo los flecos de su manto, y todos los que lo tocaron quedaron curados" Palabra del Señor Reflexión del Papa Francisco Después de la multiplicación de los panes y de los peces, Él invita a los discípulos a subirse en una barca y a esperarlo en la otra orilla, mientras Él despide a la gente y luego se retira a rezar en la montaña hasta la noche. Mientras tanto en el lago se desata una fuerte tormenta, y es ahí, en medio de la tormenta que Jesús llega a la barca de los discípulos, caminando sobre las aguas del lago. Cuando lo ven, los discípulos se asustan, piensan que es un fantasma, pero Él los tranquiliza: "Animo, soy yo, no tengan miedo" Pedro, con su típico impulso, le pide casi una prueba: "Señor, si eres tú, ordéname de ir hacia ti caminado sobre las aguas"; y Jesús le dice: "Ven". Pedro baja de la barca y se pone a caminar sobre las aguas; pero el fuerte viento lo embiste y comienza a hundirse. Entonces grita: "Señor, sálvame", y Jesús le tiende la mano y lo saca. Esta narración es una bella imagen de la fe del apóstol Pedro. En la voz de Jesús que le dice: "Ven", él reconoce el eco del primer encuentro sobre la orilla de ese mismo lago, y luego, una vez más, deja la barca y va hacia el maestro. Y camina sobre las aguas. La respuesta confiada y rápida a la llamada del Señor hace realizar siempre cosas extraordinarias. Pero, Jesús mismo nos decía que nosotros somos capaces de hacer milagros con nuestra fe, fe en Él, fe en su palabra, fe en su voz. En cambio, Pedro comienza a hundirse en el momento que deja de mirar a Jesús y se deja envolver por las adversidades que lo rodean. Pero el Señor esta siempre ahí, y cuando Pedro lo llama, Jesús lo salva del peligro. En el personaje de Pedro, con sus impulsos y sus debilidades, es descrita nuestra fe: siempre frágil y pobre, inquieta y todavía victoriosa, la fe del cristiano camina al encuentro del Señor resucitado, en medio de las tormentas y los peligros del mundo. También es muy importante la escena final. "apenas subieron en la barca, el viento cesó". Aquellos que estaban en la barca se postraron delante de Él, diciendo: "de verdad tu eres el Hijo de Dios". En la barca están todos los discípulos, acomunados por la experiencia de la debilidad, de la duda, del miedo, de la poca fe. Pero cuando sobre aquella barca sube Jesús, el clima cambia en seguida: todos se sienten unidos en la fe en Él. Todos los pequeños y atemorizados se hacen grandes en el momento en el cual se arrojan de rodillas y reconocen en su maestro que es el Hijo de Dios. Cuantas veces también a nosotros nos sucede lo mismo, sin Jesús, lejos de Jesús nos sentimos temerosos, inadecuados a tal punto de pensar que no podemos salir adelante, ¡falta la fe!. Pero Jesús está siempre con nosotros, tal vez escondido, pero siempre presente y listo para socorrernos. Esta es una imagen clara de la Iglesia: una barca que debe afrontar la tormenta y a veces parece que va a ser hundida. Lo que la salva no es la calidad o el valor de sus hombres, sino la fe, que le permite caminar incluso en la oscuridad, en medio de las dificultades. La fe nos da la seguridad de la presencia de Jesús siempre al lado, que nos tiene de la mano para alejarnos del peligro. Todos nosotros estamos sobre esta barca, y aquí nos sentimos seguros no obstante nuestros límites y nuestras debilidades. Estamos seguros sobre todo cuando sabemos ponernos de rodillas y adorar a Jesús, adorar a Jesús, el único Señor de nuestra vida. A esto nos llama siempre nuestra Madre, la Virgen. A ella nos dirigimos con confianza. (Reflexión antes del rezo del Ángelus, 10 de agosto de 2014) Oración de Sanación Mi Señor, te doy gracias al despertar y celebro con gozo la dicha de haberte encontrado, pues tu presencia ha llenado de estabilidad y seguridad mi vida En cada nuevo amanecer me brindas posibilidades infinitas de alcanzar mis sueños si me dejo guiar por la fuerza y el poderío de tus Palabras. Lléname de tu fuerza para que en mi vida abunde la esperanza. Llévate esos miedos de mí que evitan que yo pueda seguir avanzando con paso firme. Ayúdame a confiar en Ti, porque cuando lo hago siento que puedo caminar sobres las aguas violentas de la oscuridad, de la enfermedad o sufrimiento. Pongo todo en tus manos, la barca de mi vida es tuya. Toma el timón de mi corazón. Tú eres mi Dios, mi seguridad, por quien me declaro en victoria. No quiero valerme de mis propias fuerzas, porque al hacerlo dejo de recibir tu apoyo y podría hundirme al mínimo destello de inseguridad Contigo, hasta el fin del mundo. Dame fe, esperanza y valentía para enfrentar toda tempestad y toda fuerza oscura que parece dominar al mundo. Sé que, si Tú me acompañas, tus gracias y bendiciones me harán caminar con firmeza hacia tu Patria celestial. Amén Propósito para hoy Durante el día de hoy, tener breves momentos de oración para decir: «Señor, yo creo. Ayúdame en mi incredulidad» Frase de reflexión "El perdón libera el corazón y le permite recomenzar: el perdón da esperanza, sin perdón no se construye la Iglesia". Papa Francisco Video reflexión para hoy Oración de sanación: Toma el timón de mi corazón. Tu eres un Dios de victorias Comparte el Evangelio en las redes sociales Facebook Twitter Whatsapp Google Artículos de interés Santo Domingo Guzmán. A quien la Virgen le enseño cómo rezar el Rosario Vaticano concede permiso especial para que una monja oficie una boda. Cuando ningún sacerdote estaba disponible, un obispo solicitó y recibió permiso del Vaticano para que una monja local oficiara una boda. 9 formas más comunes de infidelidad y cómo proteger tu matrimonio La infidelidad destruye matrimonios. Si quieres proteger tu matrimonio de la infidelidad, te aconsejo que evites los estos comportamientos En tiempos difíciles acude a San Judas Tadeo, santo de los casos imposibles Sea cual fuese el problema que estás enfrentando, tiene que saber que San Judas Tadeo espera por tu llamada de auxilio Un buen ayuno: Aprende a ayunar con la lengua Una de las armas más poderosas que tenemos es nuestra lengua. Las palabras tienen un increíble poder para el bien o para el mal. Practica este ayuno 5 formas de luchar contra un corazón inquieto Algunas formas de encontrar nuevamente el sendero que lleva a Dios cuando nos desviamos del camino Mensaje de ánimo y esperanza Minuto de esperanza: el poder que te respalda es inmenso PildorasdeFe.net es un Portal Católico con un contenido lleno de reflexiones en temas de evangelización. Te invitamos a sumarte a nuestros esfuerzos. Si está en tus posibilidades puedes realizar un donativo y ayudarnos a seguir construyendo el Reino de Dios. Danos una mano amiga. Dios te recompensará a ti y a los tuyos Dona aquí ¿Desea suscribirse a nuestros Listados? - Suscríbase aquí Para cancelar su suscripción al Evangelio diario haga Clic aquí: - Cancelar suscripción Caracas, 1010, Caracas, Venezuela, Bolivarian Republic Of Usted puede darse de baja o cambiar sus datos de contacto en cualquier momento.
martes, 8 de agosto de 2017
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
0 comentarios :
Publicar un comentario